Canto de las horas inocuas

By Tlemoyotl

Horas inocuas
que pasan deambulando la noche
los dias, los segundos y los soles
que abruptamente desaparecen
en la veleidad del sueño lunar
y es que no se sabe exactamente
a que hora, en que segundo,
en que latitud naciste,
unos dicen que fue el azar quien te vio nacer
otras y otros que la tradición banal y cruel.
No se tiene certeza del diáfano momento
pero pasó como un ventarrón de mariposa
suave, sutil, mágico y brutal en sus consecuencias
de incierta ala inquieta voladora
que aprendió a volar entre cemento.
Unos y unas se derriten con su natural ternura
versos y pasiones milenarias se desbordan
en la carretera impávida del desconcierto
queriendo saber porque se siente eso que retiembla
que inunda el corazón de fuertes latidos
ondas matinales y nocturnas fulgurantes
que no deja descansar el ardiente sabor a vida y a muerte.

Definiciones, conceptos, que vuelan al vacío del universo
te nombran amor, deseo, pasión, conexión, totalidad
que pretenden explicar la llama desgarradora en versos
del beso, la carne, el agua viva y el recuerdo
porque desnudas al alma que, todo lo absorbe como esponja
lamiendo cada rincón del presente
de su fatal destino inconmensurable,
nadie sabe como llega, se desarrolla y crece
tanto que alcanza soles y universos innombrables
se extiende por superficies rocosas, acuosas y solares,
su voz retumba en los planetas palpitantes
y cuando se va o parece cansarse
baja nuevamente a su estado natural
terrestre, deshumano, posesivo, antinatural.
Pero es que nadie se salva de su cadencia
hasta los más valientes han sucumbido
arrastrados entre las hierbas del concreto
perdidos en las veredas de Dionisio,
y solo queda de ti un rincón de lo que fuiste
en el alma mía que te pudo sentir de cerca
que sin esperar nada a cambio, abrió sus alas
y voló sobre las nubes, los cielos y los cosmos
que presenciaron el fuego, el agua y los gemidos todos 
inspirados en un solo nombre de mujer
que comienza con una B para ser preciso,
pero que termina con la epifanía de tu apellido: amor.


II


Nada permanece en el umbral del olvido
porque la luz y las sombras son hermanas
del incansable vuelo del águila en el nopal
que según dicen los que saben, llegó a Tenochtitlán,
luces de resistencias que emergen como tu nombre
blanca luz de empatía, dadora de amor como ninguna
pero también sombras de pillaje, robo y catolicismos a ultranza
que denotan su origen en tu acento madrileño.
Y me pregunto lo imposible
de cómo ha quedado tu presencia
tatuada como estrella en el cielo
tan bella y lejana, eternamente cercana
entre mis dedos que besan la almohada
después de tantas y letargas mañanas,
largas por la ausencia de tu mirada
y es que no puedo expresar mi flor y canto
sin mencionar lo que a mi alma tiene en encanto
recordando la vida totalizadora a tu lado,
o la cercanía a muerte que albergó tu recuerdo
que deambula ahora entre sueños encontrando
la peculiar sonrisa, mirada, voz o cuerpo
el beso anhelado de tu alma en mis labios
que solo te encuentran en esos,
malditos, bendecidos sueños.


III


No se puede hablar de ella sin hablar del amor
ni tampoco se puede nombrarlo sin gritar revolución
porque ella fue, es y será el incondicional motivo
que se manifiesta inmensa como campos de olivos 
arduos torrentes de sudores y rabias,
en los espejos rotos de la distorsión del tiempo
de profundos cambios que llegan cual primavera
lenta, colorida, rebelde, sembrada por los cantos en vela
y de tantas utopías fuertes como truenos.
Bien lo sabemos
tomará tiempo llegar a entendernos sin dinero
cuando digamos ‘presente’ queriendo cambiarlo
como lo hicieron millones de mujeres y hombres libertarios
en la historia cuando intentaron someternos y dominarnos
sí, perdimos batallas que nos costó más de medio milenio
en letárgicas terroríficas noches tenochcas, mayas, purépechas
de la cual fuimos despertando en agónicas centurias
hasta explotar nuestra dignidad rebelde en gritos de independencia
entre avatares de conflictos pero prevaleciendo la decencia
antes que se secaran las voces llegaron las revueltas
y se sembró la esperanza del único soberano, el pueblo
que unidos pelearon con el corazón en mano
expulsando reyes y paradigmas arcaicos.


IV


Asi pasan las horas, atiborradas unas a otras
en la tibia, turbia, frágil espiral de 39 años
a veces cansadas en el eterno andar terrenal
que se desprende de la conciencia cósmica primordial
como bacterias que dejan su banal presencia
para las especies que vienen surcado atrás,
y es que 39 años son nada en el espejo sideral
tan solo seis mas que Jesús en su condena fatal
una milésima de suspiro en la constelación fugaz
de sones, sabores, colores, amores y desilusiones
pero qué mas da! no escogimos el regalo de vida
que abrupta llega sin consenso a desafiar,
y los agradecimientos son los que nunca faltarán
en los goces que embriagan la mano amiga
que alienta a marcar rumbo para dejar huella audaz 
de quienes nos dieron alegría de poder respirar,
nadie a sabe con certeza que seguirá
si habrá tiempo para construir una diferente sociedad
que dé paso al enjambre de aves multicolores mas allá
mostrando la majestuosidad de apoyo mutuo
la valerosa justicia impregnada en alas de igualdad
que eleven al ser humano a la ansiada libertad
donde todas y todos vivamos momentos alegres
de desafíos sin la competencia estéril, banal
y los sueños sean la imaginable realidad.


V


Mérida no es mi lugar de nacimiento
sino mi lugar materno que anuncia mi apellido
muy por encima del que antecede al paterno
que por pena del progenitor es mejor no nombrarlo
porque si bien ambos son de origen español
Mérida es mas bello por la dignidad de mi madre
que sin ser emérita como su latinidad demanda
pone en alto la lucha constante e incansable
de la mujer mexicana, guerrera, que todo lo salva
a pesar de las históricas y duras dificultades
como cuando antaño los criminales de España llegaban
imponiendo lenguaje, cosmovisiones y construcciones sociales
entre otros atropellos de bajeza animal y no humana.
Y es que antes de ser Mérida como ciudad de peones
desde la época colonial hasta la Revolución Mexicana,
tu nombre fue Ichkanzihóo o ciudad de los cinco montes
referenciando tus extraordinarias pirámides mayas
Ah Mérida! entre tantos descalabros te esparciste
surgiste con Augusto 25 años antes que Jesucristo
en un lugar allá por donde pasó Sancho y el Quijote
cruzaste los mares y te convertiste en plinto
en Yucatán y Venezuela llegaste y te impusiste
y hoy en tierra blanca, maya, negra o mestiza te haz convertido.


VI


Polvo que se renueva, así somos
en la infinitud de los soles
arrasando la materia viva
en la oscuridad y sus umbrales
que se agiganta y dispersa
e irradiamos antes de ser terrenales,
resguardo de luz y sombras
nos fuimos esparciendo
hermanándonos unos a otras
y después construyendo
por donde la madre nuestra
nos daba alimentos
convirtiendo lo inerte en dulce savia
con cobijo y cuidado
polvo en tierra y de ella montañas
y en el cielo, universo en despilfarro
su ilimitada redundancia,
un hidrógeno y dos de oxígeno
y después, ya es agua
rios, lagos y mares
mezclados en materia inmediata,
y demás cosntelaciones solares
que riéndose del tiempo lo aquilatan
y descifran los azares
que nos hace raza humana
dizque pensante.

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Distancia

Amargura del dolor inhóspito

Del ser amado que se va estrepitosamente

Inválida y vulnerable en tu cama ante lo esperado

Ojalá hubiese sido natural tu despedida hiriente

Saber que se hizo lo posiblemente humano

Así mi madre encontraría un consuelo suficiente

Bastante fuerte y guardarte en su amor diáfano

Una guerrera indígena que sucumbe ante lo carente

Entre hospitales urbanos que están en vano

Lúgubres recintos de injusticia y prepotencia

Allí solo encontraste el mal trato de lo inhumano

Librada haz quedado de este mundo en decadencia

Inhóspito para quienes nacimos sin cuidado

Bolas de carne y hueso del ejército de reserva

Reproducción del capital que acumula lo profano

Ante la vida impera su muerte estéril, cruenta

Decirte adiós es duro para mamá en su amor innato

Aquí de lejos te recuerdo y te digo Mah cualli ohtli.

Maria Elena Rios

Rios de rabia e indignacion

al saber de tus palabras dolientes

de tu ser femenino agredido

por el criminal cobarde mal nacido

Rios de agua y musica en tu niñez

en esas tierras valientes oaxaqueñas

de saxofones, flores, montes y árboles

te vieron florecer fuerte y hermosa

en tu Huajuapan llena de dulces soles

Rios de rabia e indignacion

al saber de tus palabras dolientes

de tu ser femenino agredido

por el criminal cobarde mal nacido

Rios de frustracion ha de ser tu pesadilla

que desde ese dia haz vivido

como abrazarte y luchar quisiera

que sepas que la soledad se ha ido

aunque no nos conozcamos compañera

Rios de rabia e indignacion

al saber de tus palabras dolientes

de tu ser femenino agredido

por el criminal cobarde mal nacido

Rios de coraje y lagrimas en la distancia

como empatía por tu ser admirable

que con todo el peso de la injusticia

sigues peleando por encontrar al culpable

inmundicia de hombre priista machista

Rios de rabia e indignacion

al saber de tus palabras dolientes

de tu ser femenino agredido

por el criminal cobarde mal nacido

Rios de agradecimiento a tu luz femenina

por dejarme sentir repugnancia al patriarcado

brutal, criminal, banal, cobarde, asesino

que hoy mata y agrede a la única esperanza

de que el mundo vuelva a ser prístino

Rios de rabia e indignacion

al saber de tus palabras dolientes

de tu ser femenino agredido

por el criminal cobarde mal nacido

Rios de gritos, denuncia e indignacion

me alienta a buscar las calles con mujeres

ser más consciente,feminista y luchador

como ustedes grandes referencias valientes

de lo bello que puede ser el humano en su interior.

Río thames

Después de disfrutar entre tanta gente en ese lugar histórico y lleno de corazones que no pierden esperanza, decidí ir a caminar sobre el puente y encontrar un lugar para comer, crucé la calle y me encaminé siguiendo las siluetas de los transeúntes, muchos de ellos turistas que se paraban a sacarse la foto sobre la inclinacion del puente de Westminster (donde a su derecha se haya el famoso Big Ben y que se encontraba completamente cubierto por la remodelacion que le estaban dando), subiendo un poco más y teniendo como fondo el Parlamento Britanico y el Palacio de Westminster había un grupo de españolas y españoles que se hacían fotografías, selfies y en grupo, con el horizonte de fondo en el palacio de estilo gótico se podían apreciar esas diminutas siluetas de parlamentarios que se aglutinaban en esa terraza larga que acompañaba al río que escurria a su lado, como escuchando sigilosamente las conversaciones de aquel día agitado e importante para la política británica, no sólo al interior sino también de alcance continental y mundial.

Mientras subia la pendiente del puente, observé el grupo de españoles que reían y disfrutaban las poses fotográficas, pasé a su lado escuchando ese lenguaje familiar y me detuve observando el horizonte recargando mis manos sobre el barandal metálico del poderoso puente de 250 metros de largo, miré a lo lejos los edificios que surgían cómo hongos al por mayor a cada nueva visita por la ciudad, quedaban como escenario de fondo del rio gris y caudaloso que seguía cambiando el horizonte, la luz del sol que por ratos se dejaba ver enorme en el cielo y coloreaba de chispas el agua que se agitaba turbia y silenciosa por debajo del puente; no deje de pensar en lo caluroso de las coversaciones que debían llevarse a cabo a no más de 100 metros de donde me encontraba y, me sorprendía el haber apenas descubierto esa larga terraza donde los parlamentarios bebían cerveza discutiendo asuntos de Estado, se alcanzaban a ver sus diminutas siluetas con sus blancas camisas.

Seguí caminando y al llegar al final del puente del otro lado del río, decidí caminar hacia la izquierda teniendo que cruzar corriendo porque los carros y autobuses que venían de ambos lados de dicho puente, crucé y al ver desde allí una cafetería me dirigí a buscar un sándwich, estaba muy hambriento, se encontraba bajando las escaleras del corredor que acompaña al río en ambos lados, es el centro de Londres y hay miles de transeúntes que caminan sobre él, hay unos leones de piedra justo sobre la calle del puente al lado de las escaleras, cómo cuidando la primera entrada de la calle que lleva al Big Ben, bajando las escaleras se vislumbra el ojo de Londres que se sitúa de ese lado del río, como a 50 metros, rueda de la fortuna metálica enorme que sube a los turistas que pagan cuantiosas libras esterlinas y puedan ver desde las alturas la perspectiva de los alrededores, de noche se cubre de colores diferentes, de lejos si parece un ojo luminoso sobre el río.

Compré un wrap de falafel y aguacate, un jugo de naranja y me dispuse a comer sentado encima de una barda que se extiende afuera de la cafetería. Después de terminar de comer se escuchó el violín y te alcancé a vislumbrar a unos cuantos metros con tu prima y tus tíos, después me contarías eso. El sol ya viene bajando y alumbra hermosamente el cielo de colores rojizosy morados, disfruto. Te sentaste sobre la misma barda donde yo estaba viendo el sol caer a lo lejos, cómo a un metro de mi, también dejas tus ojos ser testigos de un dia cualquiera, te miras inquieta, como que no sólo basta lo pictoresco del día sino también el ser que lo sustenta, que le da vida, la gente que va y viene de un lado a otro sobre el río y a su lado, justo enfrente del edificio del otro lado del río (donde se encuentra la entrada de la estación Westminster del Tube y enfrente de ella cruzando la calle el muy reconocido Bing Bang que, como decía, se encuentra totalmente cubierto de andamiajes por su renovación de un par de años, según avisaron algunos medios). Esa inquietud de conocer, la esencia del ser humano, se propaga y transmite entre los poros de los buscadores de esperanzas, así que presintiendo la intención te pregunto tranquilamente ¿de vacaciones? me respondes que sí, que vienes con tus tíos a visitar a un primo que estudia en Cambridge, que lo están esperando y me comentas que siendo tan joven tienes metas y objetivos, me compartes cómo joven, mujer italiana, tus ideas de querer estudiar economía, que te irás a vivir a Milan a estudiar en una universidad católica y porque es un lugar más cercano al centro de Europa y , por lo tanto, más cosmopolita en algunos aspectos, como las relaciones personales- es porque de donde yo vengo es un pueblo más cercano A Florencia, y allí no me gusta mucho, quiero conocer más gente, tener contactos que me puedan enriquecer la estancia universitaria y que mejor que Milán, me gusta mucho esa ciudad. Además que la gente piensa diferente , hay más puntos de vista, bueno, no siempre y no todos pero hay, por ejemplo, algunos amigos con los cuales discuto del daño que le estamos haciendo a la naturaleza constantemente, que no estamos cuidando la única casa que tenemos, que el dejar de comer carne ayuda también para reducir el consumo de agua y de calentamiento global y esas cosas, ellos me dicen que es algo normal y a mi de enoja, aun así yo sigo tratando de convencerlos, hacer cosas mínimas aunque sea pero hacer algo ya, incluso traigo mi botella para el agua especialmente para reducir el consumo de plásticos-. Me comentabas hasta que llegó tu primo que se acercó para saludarte, ya había llegado y nos despedimos con un buen sabor de charla, en una tarde de mitin laborista lleno, justo detrás del big bang cruzando la calle, en el conocido cuadro del Parlamento, donde vibraron voces de esperanza y de turistas jóvenes, compañeras jóvenes de ideas nuevas y esperanzadoras cómo tú , que en una charla fugaz se comparte la existencia de una tarde llena de colores embelesados de rostros y mentes cómo la tuya, camarada Federica.

Amabilidad

Los grandes pequeños detalles

del gesto, la sonrisa, la voz suave y amiga

que recuerda lo que el humano vale

en un mundo avasallado por el dinero y la ira

Lo amable, lo honesto, la comprensión

del cercano y del desconocido

en un día lleno de explotación

cómo si el capital se hubiese ido, extinguido

Son esos momentos solidarios

cuando se cede el paso a la mujer

al niño, anciano, enfermo o amigo

cuando se piensa en el otro ser

Así el fetiche se desencanta y aparta

la opresión, el sometimiento, el ego

al dignificar la vida humana

del buen trato, la compasión, el respeto.

Aunque sea un instante pasajero

en la calle, el trabajo o escuela

enaltece al género humano lo tierno

del cuidado a cualquier especie en la Tierra.

Otro año

La verdad de la brisa
que tranquila acaricia y pasa
sembrando memorias aturdidas
que del pasado reencarnan
Los años pasan y pasan
dejando su temerosa presa
del ayer desconsolado que escapa
y del presente que deja huella
Amores, sinsabores, dulces olores
del día cotidiano queda.

Cielo gris

Nuevamente cielo gris

a veces más blanco

los verdes marcos de las calles

de árboles danzando

al canto del viento

las horas semiprecisas del bus

el letargo del trabajo esclavizado

que presiona la puntualidad soberbia

del status quo que se contagia

cómo virus en mentes nuevas

lo importante pasa desapercibido

la política tiene el estigma

de quienes más de ella necesitan

y el tiempo que corre de prisa

hace su maligna magia

de fetichizar hasta los frágiles

momentos de calma y risa.

Tu y solo tú

Cuando se me olvida todo

al mirar el secreto de luna

su resplandor que la cubre

en su cuarto menguante

tu recuerdo me atrapa

y más que tu recuerdo

es la sensación de vida

de conexión intrínseca

con todo y todos

nada inconmensurable

todo armónico

el presente hecho eterno

el infinito hecho momento

y tu epifanía de presencia

resguardando el dulce encanto

tu y solo tu.

El tubo

Tantas cosas, momentos, emociones

caminar en los pasillos del tubo

llenos de gente como arcoiris multicolores

el rojo, azul, verde y demás de sus estaciones

sus sillones de colores diferentes

las mujeres

los hombres,

sus ruidos, sus risas, los diversos lenguajes

el recuerdo de tu mirada

tu sonrisa

de Eva, de Blanca, incluso la seriedad de Mona

Roberto por supuesto!

su pícara personalidad

su acento colombiano

todo se junta en una cascada de recuerdos

de pasado que huele A presente